El problema de esto es que ahora, WWE tiene miedo de que el líder de la familia Wyatt pierda toda su importancia adquirida en los últimos meses.
La derrota ante John Cena en WrestleMania, rivalidad que duró hasta Payback, había sido el medio de la WWE para tirar del acelerador sobre Bray Wyatt, para que luego, esto sirviera como una escalera para que él luchador tuviera el face-turn.
Basado en los siguientes acontecimientos, la WWE hizo bien en ponerlo en una pelea mid-card con Chris Jericho, para que pueda mantenerse como Heel por un tiempo y no pierda la apreciación del público.